En la actualidad, San Virgilio se ha convertido en un lugar atractivo para los turistas que buscan explorar pueblos fantasmas y conocer más sobre la historia de la industria minera en la región. La localidad está siendo promocionada como “el nuevo pueblo fantasma” y ofrece una experiencia única para aquellos que desean sumergirse en la historia y la cultura de la zona.
El pueblo de San Virgilio está situado al sur de Calamuchita, a la altura de Los Molles en San Luis, pero dentro del territorio cordobés y a pesar de estar en ruinas, conserva un encanto especial y una belleza única que atrae a visitantes de todas partes. La combinación de historia, naturaleza y cultura hacen de este lugar un destino turístico interesante y fascinante.
Qué puedo hacer en San Virgilio
El trekking es una de las actividades principales ya que para acceder al pueblo hay que hacer unos 8 km. El camino está muy deteriorado y se recomienda realizarlo con un guía para no perderse.
- Recorrer los túneles donde funcionaban las minas y las viviendas de los jefes mineros.
- Atravesar dos ríos transparentes y atractivos, el Guacha Corral y el Rodeo de los Caballos, que terminan nutriendo al Quillinzo. Entre los arroyos y ondulaciones, sobresale la belleza de la Quebrada del Rayo. Y la presencia casi cotidiana de los cóndores en alto vuelo, una atracción en sí misma.
- En el lugar se ofrece no solo comidas a los visitantes sino la posibilidad de alojarse en un par de habitaciones recuperadas que alguna vez habitaron los mineros.
- Durante el camino es una buena opción detenerse para conocer un poco de Río de los Sauces, para apreciar la capilla de Nuestro Señor de la Buena Muerte y el Centro Cultural Chede Rufail, convertido ahora en un centro cultural.
Cómo llegar a San Virgilio
Desde Córdoba Capital está a 190 kilómetros y a algo más de 3 horas de viaje en auto. Para hacerlo, hay que subir bastante hasta llegar a una de las partes más altas de las Sierras Grandes, una quebrada a 1.700 metros de altura.
El asfalto se termina en Elena, sobre la autovía de la Ruta 36. Desde allí se recorren 25 kilómetros de ripio hasta la localidad Río los Sauces, ubicada al sur de Calamuchita y de la cual asoma el camino de 42 kilómetros que asciende hasta los 1.700 metros de altura del ex pueblo minero.
Hasta el río Rodeo de los Caballos, el camino puede ser recorrido por la mayoría de los vehículos. Pero una vez que se llega a ese punto, solo siguen las motos, las camionetas preparadas para travesías, las cabalgatas o a pie.
Este trayecto final son unos ocho kilómetros, que atraviesan un frondoso pinar, y que se pueden hacer en dos horas de trekking sin apurar el paso, en algo más de una hora en camioneta y en algo menos en motos.