El intendente de Juan José Castelli, Pío Sander, dialogó con CIUDAD TV luego del temporal que afectó a gran parte de la zona con un registro que superó los 100 milímetros de lluvia caídos. “Tuvimos esta semana dos lluvias, una el martes con unos 50 milímetros aproximadamente, y otra esta madrugada con 70 y hasta 100 en diferentes lugares de la ciudad. Fue muy intensa, llovió en pocos minutos alrededor de las 4 de la madrugada”, comentó el jefe comunal.
Aclaró que si bien el agua está escurriendo, hubo complicaciones con los desagües, “como en toda lluvia grande”. “Estamos trabajando con un operativo de control en ese sentido porque en desagües y cunetas venimos trabajando en forma permanente para que el agua escurra lo más rápido posible. Pero hace unas 6 horas que llovió y el agua bajó muchísimo. Ya para la tarde no tendremos agua en la ciudad”, aseguró.
Remarcó que Castelli es una ciudad que “creció enormemente, se extendió mucho y es como un plato hondo”. “Hay zonas muy bajas en la región y dentro de este plato hay algunos barrios más bajos inclusive y son a veces los más vulnerables. Construyen viviendas sin levantar el nivel del suelo y eso dificulta a la hora de llover así que hay agua dentro de las casas”.
Respecto de la zona rural, destacó: “Al campo le viene espectacular, al campo le viene muy bien y, es más, sigue faltando agua en el campo. Los productores están contentos con la lluvia “.
“Fue muy despareja la lluvia, a dos kilómetros al sur de Castelli llovieron 20 o 30 milímetros y yendo un poco más al norte, noreste, tuvimos lluvias de 100, de 50 milímetros. No fue uniforme, fue muy desparejo de una colonia a otra. Lo mismo que la lluvia del día martes, llovió más en la zona sur de Castelli que ene la norte. Y días atrás, en Castelli no llovió nada y en la zona de Miraflores, de la ruta Juana Azurduy llovió más de 100 milímetros”, describió el intendente local.
“La idea es que la gente pueda cosechar agua, recargar sus reservorios, que levanten un poco las napas, los pozos de agua. La venimos pasando muy mal con cuatro años de sequía. Estás costando recuperarse los suelos, las pasturas. La experiencia este año fue que aquí no se cosechó algodón ni maíz, nada de nada porque la sequía fue tremenda. Todos los productores estaban esperando este tipo de lluvia para recargar reservorios”, aseguró Sander.