Estos datos se corresponden a las primeras tres semanas de enero, previo a la implementación de la baja temporal de retenciones. Desde su publicación en el Boletín Oficial, se habrían realizado ventas por 612 millones de dólares (trigo, maíz y soja) plausibles de ingresar al fisco a los 15 días posteriores a la presentación de las declaraciones juradas. Con estos números, algunos analistas de mercado ven con desconfianza el éxito de la medida oficial.
Granos en silobolsas
Las ventas acumuladas de la campaña 2023-24 de soja al 22 de enero (incluyendo las compras totales de la exportación y de la industria aceitera) llegaron a los 36,1 millones de toneladas, según los datos analizados por la CIARA CEC.
“A poco más de 2 meses de que comience a entrar la nueva campaña de soja, resta aún por fijar precio el 35% de la cosecha 23/24, esto es 17,7 millones de toneladas de soja, de las cuales 4,3 millones fueron entregadas principalmente a la industria, pero aún no fueron fijadas y 13,4 millones de toneladas están en manos del productor”, puede leerse en el reciente informe de la CIARA CEC.
Si se tuvieran en cuenta los remanentes de maíz de la anterior cosecha, aun quedarían sin vender o con precio a fijar cerca de 22,1 millones de toneladas de granos al 22 de enero. “De ese total, el 80% corresponde a la soja con 17,7 millones de toneladas y el 20% a maíz con 4,3 millones. En el caso de la soja hay 13,3 millones en manos de productores en silos de almacenaje propios o de terceros y 4,3 millones se han entregado a fijar y están pendientes de fijar precio”, puede leerse en el último informe de la CIARA CEC.
Mejoró la molienda
En diciembre la molienda fue de 3,6 millones de toneladas, un nivel récord para esa época del año. La importación de soja se redujo considerablemente a 110.000 toneladas. Según los datos del sector exportador, la molienda total alcanzó las 42,1 5 millones de toneladas, valor cercano al registrado en 2017 y 2021.
“La molienda de soja en diciembre volvió a aumentar, lo cual impactó en una mejora en el uso de la capacidad instalada, la cual alcanzó el índice UCI al 66%. Mientras que la capacidad ociosa fue del 34%”, indicaron desde la CIARA CEC.
La importación de soja de Paraguay fue clave para conseguir estos resultados. Si bien las compras se redujeron en diciembre a 109.804 toneladas, en todo el año se importaron 7.577.687 toneladas. El principal origen fue Paraguay representado el 89% (6.804.006 toneladas), seguido por Uruguay con el 6,4% (484.802), Brasil con el 3,1% (234.416) y por último Bolivia con el 0,7% (54.461).
“Sin la soja importada de Paraguay y Uruguay la capacidad utilizada hubiera sido del 64%”, señalaron desde la CIARA CEC.
El Destape