La misma dispuso el otorgamiento del lote 1 (frecuencias de entre 3.300 y 3.400 megahercios) a AMX Argentina, el lote 2 (entre 3.400 y 3.500 Mhz) para Telecom Argentina, y el lote 3B (entre 3.550 y 3.600 Mhz) para Telefónica Móviles Argentina.
Quedó, en tanto, vacante el lote 3 A comprendido por la banda de frecuencias entre 3.500 y 3.500 megahercios.
La disposición otorga a AMX, Telecom y Telefónica un plazo de 15 días para que realicen el pago de US$ 350.052.000; US$ 350.026.000 y US$ 175.013.000, respectivamente, lo cual podrán hacer en varios desembolsos.
Podrán hacer el pago en dólares o en pesos, tomando como tipo de cambio la cotización de cierre del dólar oficial del día previo a concretar el depósito.
En caso de no hacerlo, el Enacom queda facultado para revocar la adjudicación, con pérdida de la garantía de mantenimiento de la oferta, que cada empresa ya depositó oportunamente.
La subasta pública fue llevada a cabo el martes pasado en el Centro Cultural Kirchner (CCK).
El ministro de Economía y candidato a presidente por Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa remarcó que los recaudado por el Estado en la subasta es “muy importante en términos fiscales para el cumplimiento de metas, pero también en términos de valoración de bienes públicos y en términos de confianza del sector privado, en momentos en que pareciera que dominaba la incertidumbre política”.
Massa subrayó que cada empresa invertirá alrededor de US$ 1.000 millones en el despliegue de antenas y de fibra óptica necesaria para dar servicios con esta tecnología.
La implementación de la tecnología 5G en las comunicaciones tiene dos líneas diferentes: el servicio de internet de las cosas, la robotización, la automatización de plantas industriales y por otra parte el tráfico de datos entre personas con un incremento de la velocidad en las comunicaciones.
Las empresas que ganaron la licitación podrán utilizar la tecnología que prefieran (actualmente, en el mundo, la infraestructura es ofrecida por las empresas Ericsson, Nokia y Huawei) y gozarán de un régimen especial de importaciones para los bienes, servicios y obras que necesiten para el despliegue de las redes, debiendo cada firma presentar todos los trámites y documentación necesaria ante el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA).
Télam