Nancy Sotelo, referente de la Fundación de Derechos Humanos y Géneros (FUNDEG), visitó los estudios de CIUDAD TV tras el encuentro que mantuvo con la presidenta de la Legislatura chaqueña, Carmen Delgado, en el que presentaron el trabajo de un proyecto coordinado para la garantía y promoción de los derechos de las infancias.
“Soy integrante del equipo de FUNDEG y, en esta oportunidad, nos reunimos con la presidenta de la Legislatura chaqueña para darle a conocer los trabajos que venimos impulsando y, específicamente, un proyecto que aborda la sensibilización en materia de derechos humanos de niñas y adolescentes en la prevención de matrimonios infantiles”, señaló.
Sotelo explicó que el proyecto es llevado adelante junto con la Fundación para el Estudio y la Investigación de la Mujer (FEIM). “Es una fundación con más de 30 años de historia en nuestro país, presidida por la doctora Mabel Bianco. Es la fundación que se ha encargado hace un tiempo de abordar la temática de los matrimonios infantiles y uniones forzadas”, detalló.
La iniciativa, que contempla talleres de sensibilización, capacitaciones y articulación territorial, se implementa en Chaco, Salta, Misiones y Jujuy. “Más del 5% de niñas menores de 18 años están en situación de matrimonio en nuestro país, y es difícil tener certeza sobre los números porque muchas veces hablamos de uniones ilegales y naturalizadas, sobre todo en zonas rurales”, indicó.
El objetivo central del trabajo, explicó, es brindar a niñas y adolescentes un espacio de escucha e información sobre sus derechos. “Apuntamos a articular con actores de la sociedad civil, con el Estado, con docentes, con trabajadores de la salud. Queremos consolidar una red donde las niñas y adolescentes puedan encontrar un lugar de contención”, expresó.
Sotelo advirtió que las uniones tempranas “muchas veces son la barrera para que una niña pueda terminar la secundaria o iniciar una carrera”. En contextos de crisis, agregó, estas situaciones también derivan en embarazos tempranos. “En una sociedad atravesada por distintos niveles de violencia, la posibilidad de elegir un proyecto de vida se ve con dificultades en las mujeres. A veces es un embarazo no deseado, a veces deseado, pero sin condiciones. Sin acceso a derechos”, subrayó.
“Muchas adolescentes ven en una unión temprana con un hombre mayor una salida. A veces del hogar, a veces de un contexto de violencia, o como una posibilidad de sostén económico”, alertó.
La referente de FUNDEG también puso el foco en el marco normativo vigente y señaló que es otro eje desde donde se aborda la problemática a nivel mundial. “En Argentina, las niñas pueden casarse a partir de los 18 años, pero con 16 ya pueden hacerlo si cuentan con autorización de madre, padre o tutor. En otros países, incluso a los 14”, remarcó.
En su análisis, Sotelo cuestionó la justificación de estas prácticas como parte de tradiciones culturales: “Tenemos culturas distintas, pero muchas veces la violencia se disfraza de prácticas culturales. No hablamos, por ejemplo, de la práctica del chineo como sí se visibiliza en Salta o Santiago del Estero. También ocurre en nuestra provincia”.
“En los talleres, madres y niñas nos dicen: ‘No es cultural que nos violen o que nos abusen’. Poder reconocer esa violencia es el primer paso. La cultura de la no violencia debe trascendernos”, afirmó.
A nivel local, además de trabajar en escuelas como la Cacique Pelayo, FUNDEG impulsará acciones en centros comunitarios y otros espacios. “Los primeros encuentros son para compartir información, pero siempre llega ese ‘¿te puedo contar algo?’ que abre la puerta a lo que no se dice”, relató.
Finalmente, remarcó la necesidad de una mayor presencia del Estado: “Tenemos un Estado muy fragmentado, que muchas veces no está presente, y es muy difícil garantizar derechos sin el Estado. Es un trabajo doblemente costoso, pero necesario de hacer”.