“Tenemos la enorme responsabilidad el 10 de diciembre de dar vuelta la página, llamar a la unidad nacional y hacer la tarea más importante que tenemos por delante”, manifestó Massa y recordó la figura del fallecido exgobernador cordobés, José Manuel de la Sota. Massa afirmó que de ser electo, será el “presidente que abrace definitivamente a Córdoba para terminar con tantos años de desencuentro” y confió: “Voy a llamar al gobernador Llaryora. Le voy a decir que armemos la agenda porque Córdoba es el corazón de la Argentina y tenemos cuatro años de trabajo juntos”.
En su discurso central, que brindó en el estadio cubierto del club General Paz Juniors de la capital ante unas 5.000 personas, Massa reiteró sus propuestas y convocó al gobernador electo, Martín Llaryora, para trabajar en conjunto desde el 10 diciembre si es elegido presidente. Mientras que horas antes de ese multitudinario encuentro con la militancia y referentes peronistas de la provincia, el gobernador Juan Schiaretti volvió a distanciarse del candidato oficialista y expresó una serie de reclamos.
En tanto, el ministro de Economía no solo optó por convocar al sucesor de Schiaretti en la provincia, el gobernador electo Martín Llaryora, a formar parte de la “unidad nacional”, sino que también recordó a su antecesor, el fallecido José Manuel de la Sota.
“Desde el 10 de diciembre, mi compromiso en memoria de José Manuel de la Sota, de que Córdoba sea parte del crecimiento y desarrollo del país; y nunca más tenga que hacer juicio a la Nación para ser parte de la justa distribución de ingresos”, expresó Massa.
Además, destacó a la provincia cordobesa como a “uno de los grandes motores de la economía Argentina” y destacó a sus “productores agropecuarios”.
“Queremos arraigo, queremos desarrollo rural, queremos al interior del interior de la Argentina”, enfatizó. También llamó a “defender el derecho de cada uno a profesar la religión que se quiera” y pidió que el “Papa Francisco, frente a tanto agravio, venga a la Argentina”.
“Él para nosotros no es el demonio como plantea el otro, es el argentino más importante de la historia”, contrastó en referencia a expresiones del candidato presidencial de La Libertad Avanza (LLA) Javier Milei, quien había dicho que el Papa es “el representante del maligno en la tierra”.
Además, Massa defendió “el trabajo con derecho a la indemnización y las vacaciones pagas” y exhortó a pensar en “el nuevo mundo del trabajo” sin “transformar a nuestros trabajadores en esclavos”.
“Estamos frente a un nuevo tiempo, que la revolución de la tecnología nos obliga a pensar el nuevo mundo del trabajo, a defender el trabajo con derecho a la indemnización y de las vacaciones pagas, frente a aquellos que creen que esta revolución les da la oportunidad de transformar a nuestros trabajadores en esclavos o ciudadanos de segunda”, expresó.
Y le pidió a la sociedad que “no den un paso atrás” pese a reconocer “errores” y sostuvo que “el enojo no los puede llevar al salto vacío, no los puede llevar al pasado”.
Sobre el final, Massa destacó la figura del empresario cordobés Juan Blangino como un representante de la “industria nacional” a imitar y pidió ayuda a la militancia para cumplir una promesa que le hizo al empresario de tomar “mate en la Casa Rosada” después del 10 de diciembre.
En el predio de Juniors se destacó la presencia de numerosas agrupaciones gremiales y organizaciones sociales, además de personalidades como la diputada Gabriela Estévez; los diputados Pablo Carro y Eduardo Fernández; el cura Mariano Oberlín; la presidenta de Fadea, Mirta Iriondo; y la vicepresidenta de la Legislatura provincial, Nadia Fernández, integrante del gobierno provincial y que expresó su apoyo a la candidatura de Massa.
En ese acto que encabezó Massa en la capital provincial, fue el único orador y compartió sus propuestas para llevar adelante en un eventual gobierno, entre las que destacó defensa de la educación pública y gratuita, y también reconocieron la propuesta de defender la soberanía de las Islas Malvinas y la igualdad de género, las consignas más aplaudidas por los presentes.
Télam