Esta “acción contra el lesboodio” y en memoria de las mujeres asesinadas tuvo tal convocatoria que obligó a cortar el tránsito en la Avenida Montes de Oca para dar lugar a la concentración convocada en la Plaza Colombia donde se leyó un documento.
El contexto del crimen
“Este crimen de odio fue agravado por las condiciones precarias de vivienda en la que se encontraban las chicas – Pamela, Andrea, Roxana y Sofi -, la ausencia de políticas públicas frente a la crisis habitacional”, agregó.
Además, señaló que “la promoción y reproducción de discursos de odio por parte del gobierno” resaltan la responsabilidad del estado en relación a este hecho, porque “esos discursos no son gratuitos ni inofensivos, se llevan nuestras vidas”.
Posteriormente, los manifestantes marcharon hasta el hotel de la masacre, ubicado en Olavarría 1621, donde se leyó poesía, hubo performances y se instaló un altar.
En simultáneo, se registró también una acción en la ciudad santafesina de Rosario, frente al mural Rosario Libre de Lesboodio (Arturo Ilia y Sarmiento), para reclamar justicia por la masacre de Barracas.
La voz del Gobierno
Estas manifestaciones se produce un día después de que se conociera la tercera muerte producto del crimen de odio registrado en la madrugada del lunes 6 de marzo y a una semana del ataque al que por primera vez se refirió hoy el vocero presidencial Manuel Adorni, minimizando sus implicancias.
“Nos parece muy injusto sólo hablar de este episodio cuando la violencia es algo mucho más abarcativo que simplemente una cuestión contra un determinado colectivo y hay mucha gente que lo sufre, muchas mujeres y hombres que sufren violencia y son cosas que no pueden seguir pasando”, dijo.
En la madrugada del lunes 6 de mayo un adulto mayor atacó con un dispositivo incendiario la habitación donde dormían dos parejas de mujeres, que eran sus vecinas de un conventillo de Barracas donde todos vivían.
Se trata de Justo Fernando Barrientos de 68 años, quien luego de agredir a sus vecinas intentó quitarse la vida autoprovocándose cortes en el cuello con una sierra, según fuentes policiales.
No obstante, el agresor ya fue dado de alta y sigue detenido.
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