“Lo que ha sucedido tiene que ver con la intolerancia, la prepotencia, la falta de respeto y el querer avasallar una de las instituciones que es pilar de la democracia como el Congreso de la Nación. El presidente de la Nación, un aprendiz de Fujimori, cree que lo que él dice y envía tiene que tener el acompañamiento de todos los sectores porque se basa en el 55% que sacó en segunda vuelta, como si eso le diera carta blanca para violar la Constitución de manera totalmente arbitraria”, apuntó Aldo Leiva, legislador nacional de Unión Por la Patria, en declaraciones para CIUDAD TV.
Para Leiva, el propio presidente “generó estas condiciones tratando a los diputados que querían colaborar con él de coimeros, dijo que sabía que circulaban valijas de diferentes sectores que estaban haciendo lobby en favor o en contra de la ley, sin precisar nunca a quiénes se refería y todo a partir de la prepotencia que él cree que le da el haber ganado en segunda vuelta por ese margen y amparado sin ninguna duda por los medios de comunicación concentrados que hasta el momento siguen mirando o acompañando de manera complaciente todo lo que dice este señor”.
“Desde el primer momento, dijimos que el proyecto debía volver a comisión, que no era posible que estemos debatiendo sobre algo que los mismos diputados oficialistas y los funcionarios no sabían ni siquiera de qué se trataba. El proyecto fue elaborado por los estudios jurídicos de las grandes empresas que financiaron la campaña de Javier Milei, las reuniones se realizaron prácticamente en un Congreso clandestino y paralelo que funcionaba en el hotel Savoy, en un departamento de Recolecta y vaya a saber en cuántos otros lugares de los grupos económicos importantes que acompañan a Javier Milei”, sostuvo.
Sobre el fracaso de la iniciativa, el legislador señaló que “ya era un secreto a voces que iban a tener dificultades cuando se comenzara a tratar en particular ya que eran muchísimos los diputados que, más allá de que lo habían acompañado en la votación en general, siempre dejaban trascender que había artículos que no estaban dispuestos a acompañar. Eso sucedió en la sesión del día martes, entonces Pichetto le tiró un salvavidas para que no fuera tan catastrófica la derrota del oficialismo porque empezaba a haber una diferencia abismal entre los votos a favor y los votos en contra del proyecto”.
“Es un despropósito este proyecto de ley, el gobierno peca de soberbia, de impericia, de improvisación y cree que los diputados, diputadas, senadores y senadoras estamos para ir a sentarnos y levantar la mano en todo lo que el presidente de la Nación dice y la verdad que cada uno de nosotros, al igual que él, fue elegido por la voluntad popular y cada uno tenemos derecho a exponer nuestra visión, votar en una u otra dirección y eso no tiene por qué ser calificado de la manera que lo ha hecho el presidente”, dijo y cuestionó el “escrache contra los diputados incluso desde su mismo bloque como Carolina Píparo que optó por votar uno de sus artículos en contra”.
Posible plebiscito
Consultado sobre la posible convocatoria a una consulta popular para poner en consideración de la ciudadanía el proyecto de ley, Leiva afirmó que “forma parte de uno de los tantos despropósitos con lo que actúa el gobierno nacional”. “No es vinculante por lo tanto el Congreso no tiene por qué convalidar lo que el presidente hace en un plebiscito, pero de todas formas está equivocado porque estoy convencido de que si avanzara en esa dirección, así como el Congreso le dijo que no, la gente de manera contundente le va a decir que no a la soberbia, la prepotencia y a este camino sin retorno que estamos teniendo”, aseveró.
“El presidente toma este tipo de actitud porque quiere tener un cheque en blanco para privatizar, para despedir, para vender nuestras tierras, para generar modificaciones en las leyes que protegen el ambiente, para que los amigos que tienen extensiones territoriales, muchos de ellos están en áreas protegidas, puedan salir a talar nuestros bosques y todo con el cuento de la libertad”, planteó el legislador nacional y destacó que, “por suerte, son muchísimos los sectores que, por todo esto que ha sucedido, han comenzado a movilizarse y han generado conciencia”.
“No ha habido desde que asumió Milei una sola noticia que sea favorable para mejorar la vida de la gente, absolutamente todo, como ocurre con los gobiernos de extrema derecha, tiene que ver con generar posibilidades para que un reducido grupo de empresarios que son los mismos de siempre ganen muchísimo más de lo que están ganando y que la gran mayoría de los argentinos seamos los que tengamos que pagar el ajuste”, cerró.