La Casa Martínez, hogar del Museo Arqueológico y Antropológico de Corrientes, es una institución dedicada a salvaguardar el patrimonio arquitectónico, ancestral y artístico en el corazón de la vecina capital. Su condición de monumento nacional, provincial y municipal, junto con su constante afluencia de visitantes nacionales e internacionales, resalta su relevancia histórica y cultural como un punto de referencia fundamental en la provincia.
Desde su inauguración en 2015, sobre Quintana 971, se ha consolidado como un lugar privilegiado para la exhibición de muestras permanentes y temporales, que incluyen tanto piezas arqueológicas como obras de arte contemporáneo. Su ubicación estratégica la convierte en un escenario perfecto para destacadas actividades culturales con un potencial artístico excepcional.
El Museo Arqueológico-Antropológico nació en 2015 tras la restauración de tres salas de la Casa de los Martínez, una antigua construcción del siglo XVIII en pleno casco histórico de la Ciudad de Corrientes.
Desde entonces, la Casa exhibe muestras temporales relacionadas con rescates arqueológicos, como urnas funerarias y alfarerías, y colabora con la conservación y restauración de piezas milenarias, alberga exposiciones permanentes y temporales de arte contemporáneo, un laboratorio y una reserva técnica.
Hoy, el Museo, institución dependiente del Instituto de Cultura de Corrientes, que preside el arquitecto Gabriel Romero, se enriquece con donaciones, cursos y actividades culturales, cuenta con talleres de cerámica y pronto iniciará uno de diseño y costura sustentable, constituyéndose en un punto de referencia cultural e histórico en la Provincia de Corrientes.
Su coordinadora, la especialista en patrimonio, arquitecta Marisol Maciel, a pedido de este medio, reflexionó al respecto.
¿Cómo nació el proyecto del Museo Arqueológico-Antropológico y la recuperación de la Casa Martínez?
El museo en realidad se concretó aproximadamente en el año 2015, una vez que ya se restauraron tres salas de la Casa. Esta es una casa que, siendo construida a finales del siglo XVIII, su solar realmente tiene origen en la fundación de Corrientes, o sea, es uno de los solares más antiguos, es decir, que el reparto colonial fue de un cuarto de manzana. La Casa entonces tiene una factura colonial pero también se continuó la construcción durante todo el siglo XVIII y XIX.
Es una vivienda de tres patios y la finalización de la restauración termina en el año 2020-2021. Con lo cual podemos decir que contamos con salas de exposición permanente, con salas de exposición temporaria, con un salón de usos múltiples y con reserva técnica y laboratorio. Bueno, el museo sigue enriqueciéndose con distintos aportes, distintas donaciones, acervos, cursos, y bien, los patios nos permiten hacer una actividad cultural un poco más intensa con eventos musicales, con muestras como las de Ñande Ñemity, muestras de arte contemporáneo de Ñande MAC, y también la flexibilidad que tiene tanto la ubicación en el pleno centro histórico de la ciudad como lo espacioso que es, habilitar distintos talleres, tenemos talleres de cerámica.
Próximamente el taller con material reciclado de textiles con Eduardo Lazos y Pedro Gaúna, de Pietro Glam, que va a iniciar en breve un taller de diseño y costura. También tenemos un almacén de artesanías originarias de pueblos que están actualmente en la región, que algunos de ellos, como los mbya guaraní, son de Posadas.
Corrientes en su historia mestiza no tiene comunidades originarias que vivan separadas, digamos, de la población o identificadas y en comunidades como sí en Posadas. Pero como todas estas comunidades eran seminómades, la cultura actual se nutre de los aportes de estas comunidades como las comunidades Qom o la Nación Qom con Pilagá, Wichi y Toba. Así es que el almacén exhibe todo este aporte.
Por otra parte, las muestras temporarias tienen que ver con los rescates arqueológicos iniciados hace 40 años por Ignacio Mujica, que estuvieron custodiados en el Museo de Ciencias Naturales, que son urnas funerarias y algunas alfarerías de origen más de utilidad doméstica, digamos, como ollas, etcétera. Y luego otro rescate que se hizo en el año 2017 en los depósitos de la entidad binacional Yacyretá, con todas las autorizaciones pertinentes por supuesto, y de ese material se exhibe otra sala completa. Y parte de ese rescate se halla en la reserva técnica del museo.
En la reserva técnica y laboratorio está la unidad regional de conservación y rescate, que se hizo un acuerdo con Nación hace seis años atrás, por lo cual tenemos distintos materiales para conservación y restauración, distinto instrumental también. Y con todo esto te digo que es un museo absolutamente rico y abierto a interactuar constantemente con la comunidad.
La Casa, un vistazo al pasado, con la mirada en el futuro
La Casa Martínez tiene visitas nacionales e internacionales. Como icónicos edificios en Córdoba, o en Buenos Aires, se encuentra en un casco histórico, y es monumento nacional, provincial y municipal.
Con Córdoba tenemos puntos de contacto históricos, sincrónicos, que es, por ejemplo, haber sido de fundación colonial, haber tenido el aporte de los jesuitas, Córdoba tiene su patrimonio de la humanidad en las estancias jesuíticas, Corrientes tiene cuatro pueblos de origen jesuítico, Yapeyú San Carlos, La Cruz, Santo Tomé.
En su momento estas comunidades interactúan mucho con las estancias de Córdoba y hay en Corrientes hace un buen tiempo una intención de hacer un rescate tanto del material arqueológico como de la cultura jesuítica guaraní. Y también Córdoba nos familiariza con la conservación de los centros históricos porque las dos ciudades tienen esa fundación y ese patrimonio de siglo, en el caso de Córdoba, del siglo XVIII, de siglo XIX, Corrientes también, mucho patrimonio de siglo XIX.
Entonces, tenemos puntos de contacto desde la conservación patrimonial, desde la arquitectura histórica, la Universidad de Córdoba que ha sentado las bases en algún punto de la conservación patrimonial. En las últimas décadas también se interactuó mucho con la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional del Nordeste, que genera también toda una normativa desde las áreas de departamento de conservación que contribuyó a la formación de la primera ordenanza de Centro Histórico de Corrientes.
Es decir que hay culturalmente muchos puntos de contactos históricos, aunque topográficamente las dos regiones sean absolutamente diferentes y las culturas tengan también matices muy diferentes. Pero es así Argentina, una nación muy grande, con mucha diversidad, pero que en la historia nos traza caminos donde nos convergemos. Y la casa también tiene esta doble característica de ser museo, o sea, tenemos un acervo patrimonial dentro de una propiedad que a su vez es monumento histórico nacional y monumento histórico provincial y municipal.
Decir que es patrimonio dentro de patrimonio, y tiene estas características de patios con aljibes, de cubiertas inclinadas, lo que es una característica singular fuera del entorno del centro histórico, ya no existe, porque desde la arquitectura moderna que prevaleció mucho, uno por la estandarización de los materiales, por la economía en tiempos y la facilidad constructiva que tienen las casas de la arquitectura moderna y de luego la continuidad de esa línea en los barrios de viviendas que tienen ya siempre una línea más económica en el diseño y en la utilización de los lotes y por ahí ha cambiado el formato de casas compactas.
Así es que la Casa funciona a la vez como una escenografía de un tiempo pasado que permite varias manifestaciones culturales en memoria, digamos, como un rescate.
La historia tiene una función social
La Casa es un sitio de consulta para especialistas, académicos, amantes de la historia nacional, un centro de referencia, además de Museo, con un equipo muy activo y crítico, atento a misiones de rescate, como recientemente junto a la Dirección Nacional de Arquitectura y el Instituto de Cultura de Corrientes.
Normalmente la historia tiene una función social y tiene una función social, pues partir de que el reconocimiento de una persona de su identidad y de su contexto es lo que le permite hacerse proyección hacia el futuro. Si eso lo trasladamos a una sociedad es igual. La sociedad se reconoce en un territorio, en un contexto histórico y con una historia.
Y en este hecho que vos me recordaste recién del rescate de los archivos históricos de la DNA, Córdoba ya había iniciado hace un tiempo un museo, archivo y exhibición de los documentos públicos de la arquitectura nacional, hecho que me enteré en el desarrollo del rescate. Y este… Cuando vayamos a Córdoba iremos a conocer ese espacio. Nosotros hicimos recientemente el rescate de los archivos que involucran cinco provincias, Corrientes, Formosa, Misiones, Corrientes y Entre Ríos, Chaco.
Con lo cual es oro en polvo, es un material del mayor interés del ámbito académico, tanto de los investigadores de la historia universal como de la historiografía arquitectónica tiene que ver con el desarrollo de la arquitectura pública nacional durante todo el siglo XX. Así es que es del mayor interés el material rescatado. Y sí, la coordinación del museo para alguien que se formó en arquitectura y patrimonio, le permite esta flexibilidad, digamos, hacer de espacio contenedor temporario de algunos rescates que se han ido haciendo.
Hemos rescatado archivos de la antigua Asociación de Maestros, de la Asociación Sanmartiniana, rescatamos los archivos de la Dirección Nacional de Arquitectura, que tiene un comodato con el Centro de Estudios Históricos y Urbanos de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional del Nordeste, con lo cual es un espacio que los contiene transitoriamente. Como acá tenemos el laboratorio y la unidad de rescate de conservación, ese momento transitorio tiene que ver con también el tiempo para limpiar y acondicionar, clasificar los archivos y después darle un segundo destino, digamos.
¿Qué responsabilidades obligan a repensar este tipo de mirada hacia dentro y hacia afuera del entorno académico?
Toda la actividad que se realiza en el museo le sirve también al personal que está dentro del museo. Es decir, cómo se conserva un documento, qué acciones preventivas podés hacer con los documentos, cómo se los pueden guardar. Eso también le sirve cuando se trabaja con pasantías. Tenemos pasantías con estudiantes de turismo, pasantías voluntarias con estudiantes de arquitectura, con profesores de historia, con gente que tiene disponibilidad de algún tiempo y se acerca a colaborar en el museo, como en este caso, Marisel Arce, que tuvo su experiencia laboral en el Museo de Vías Navegables, en el área de patrimonio, y ahora se acercó a colaborar en el museo.
Y es como ir, como dijiste bien, sembrando buenos hábitos de conservación, de buenas prácticas en la conservación de un patrimonio, que está bueno también estar atento para hacer los rescates, a lo mejor se guarda conservado durante mucho tiempo y después ya llegará el equipo que se va a encargar de investigar.
El año pasado se hizo un congreso importante de arqueología, se hizo en julio, y hemos tenido muchas solicitudes para hacer trabajos de investigación que tenemos pendientes en la reserva a los que le iremos dando curso en la medida que vayamos agilizando los trámites administrativos.
Pero necesariamente se trabaja de puertas abiertas a los grupos que se quieran sumar para las investigaciones del material que se rescata.
momarandu.com/Facundo Sagardoy