La doctora Noemí Sogari, docente- investigadora de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE, participó como disertante en el segundo evento temático virtual del proyecto EULAC ENERGYTRAN, una iniciativa que busca fortalecer los lazos de cooperación entre Europa y América Latina en materia de transición energética. El encuentro, celebrado el 17 de octubre, se centró en analizar el impacto social de la transformación energética en el escenario iberoamericano.
Durante su intervención en el Panel “Justicia Territorial y Transición Energética en el Espacio Iberoamericano”, la doctora Sogari compartió el espacio con el académico español Juan Requejo, de la Universidad de Loyola, y la politóloga y activista ambiental chilena Carolina Palma, representante de la ONG FIMA. Este espacio de diálogo internacional permitió abordar una de las problemáticas de estos tiempos: la desigualdad en el acceso y consumo de energía entre países desarrollados y en desarrollo.
La investigadora de FaCENA presentó datos sobre la disparidad energética global: en el último siglo, el consumo energético mundial se ha multiplicado por 50, pero su distribución dista mucho de ser equitativa. Los países más ricos consumen cuatro veces más energía que las naciones consideradas pobres, una brecha que plantea serios desafíos para alcanzar una transición energética justa y sostenible.
Como directora del Grupo de Investigación de Energías Sustentables y Cuidado del Medio Ambiente (GIESMA-UNNE), Sogari compartió los resultados de más de dos décadas de investigación en el desarrollo de calefones solares, un proyecto que ha despertado particular interés en la Comunidad Europea. Su trabajo apunta directamente a combatir la pobreza energética mediante el desarrollo de equipos accesibles y sustentables.
“Latinoamérica posee un gran potencial para la generación de energía solar”, explicó Sogari durante su presentación, “pero la falta de programas de financiamiento a largo plazo para la instalación de estos sistemas hace que las comunidades más vulnerables se conviertan en pobres energéticos”. Esta realidad subraya la importancia del proyecto “Optimización del calefón solar construido en la FaCENA”, que busca desarrollar sistemas térmicos solares eficientes y económicamente accesibles para comunidades de escasos recursos.
El trabajo del GIESMA-UNNE se destaca por su enfoque integral, que va más allá del mero desarrollo tecnológico. “Nuestro trabajo tecnológico integra tres pilares fundamentales: tecnología, ambiente y sociedad”, enfatizó la doctora Sogari, “estos elementos son la base del desarrollo sustentable mundial”. Esta aproximación holística resulta particularmente relevante para las zonas rurales y comunidades vulnerables que enfrentan dificultades para acceder a fuentes de energía convencionales debido a sus altos costos.
El evento se enmarcó dentro de la iniciativa EULAC ENERGYTRAN, una asociación entre la Unión Europea y América Latina y el Caribe que busca fortalecer la cooperación en infraestructuras de investigación para alcanzar una transición energética limpia, sostenible y justa. Este proyecto internacional reconoce que la transformación del sector energético debe ir de la mano con la protección del medio ambiente y la justicia social, consolidándose como un área prioritaria de cooperación científica interregional.
La participación de la Dra. Sogari en este foro internacional no solo visibilizó el trabajo de investigación que se realiza en la UNNE, sino que también puso de manifiesto el compromiso de la institución con el desarrollo de soluciones energéticas que promuevan la equidad social. Su presentación destacó la importancia de considerar la justicia territorial en la transición energética, especialmente en regiones donde las desigualdades sociales y económicas pueden obstaculizar el acceso a energías limpias y renovables.
EULAC ENERGYTRAN
La asociación Unión Europea y América Latina y el Caribe (UE-ALC) para la transición energética – EULAC ENERGYTRAN– pretende fortalecer la cooperación entre las infraestructuras de investigación de la UE y ALC para abordar un desafío común: cómo conseguir una energía limpia, sostenible y justa.
Esta propuesta quiere aportar ideas sobre cómo lograr una transición energética compatible con la protección del medio ambiente y la justicia social. La transición energética ocupa un lugar destacado en las agendas políticas de ambas regiones, UE y ALC, por lo que este proyecto puede contribuir a consolidarla como un área prioritaria de cooperación científica interregional.