La historia tenía un final escrito desde que el protagonista se precipitó a contarlo cuando tiño con un halo de tristeza la alegría de los hinchas por la obtención del Trofeo de Campeones. Aunque demoró algunos días más hasta que finalmente se pulieron los trazos finos de una transferencia que, en grueso, estaba avanzada.
Y este miércoles 3 de enero del 2024, las conversaciones que se dieron durante más de un mes y las negociaciones que se profundizaron hace al menos dos semanas tuvieron un brindis en el que se selló el pase del año: el Diablito Echeverri fue vendido al City Group en 18 millones de euros brutos más otros 9 millones brutos en variables, que en su totalidad tienen que ver con el rendimiento personal del chaqueño (debut, cumplimientos de cantidad de partidos jugados, etcétera).
Con una salvedad en este rubro que no es menor: más de la mitad de los bonus especificados serán cobrados por la tesorería de River si la joya finalmente logra ponerse la camiseta del Manchester City, como todas las partes esperan.
Si eso se produjera, hay consenso de que será a largo plazo: el Diablito se quedará en Núñez un año más, pero sólo lucirá el escudo del CARP hasta diciembre si Demichelis lo utiliza con asiduidad. De lo contrario, existe la opción pactada de que el grupo de capitales árabes anticipe su salida al 30 de junio.
Eso sí: una vez que haga las valijas, como anticipó Olé, no irá a Manchester ni será dirigido por Pep Guardiola como pasó con Julián Álvarez. Al menos no durante el 2025 y muy posiblemente tampoco en parte del 2026. En principio, su destino estará en el equipo revelación de La Liga: el Girona que ya dejó de ser una sorpresa y hoy es una realidad que se codea con el Real Madrid en la punta del torneo español.
En ese contexto, gran parte de los bonus que se acordaron podrán convertirse en cash cuando el talentoso mediapunta que acaba de cumplir 18 años este martes esté cerca de soplar 21 velitas.
Con pequeños flecos del contrato personal por finiquitar y una revisión médica -que se descarta superará sin problemas- por cumplir, Echeverri firmará un contrato hasta diciembre del 2029. El City Group pagará su salario durante el año que esté en Núñez y otros cinco más.
Para los dirigentes, el mejor acuerdo posible
Y mientras el Diablito se entrena en Chaco a la espera de subirse al avión para realizar su primera y última pretemporada de verano en River, los dirigentes creen que llegaron al mejor acuerdo posible en un marco visiblemente desventajoso. Todo al mismo tiempo que los fanáticos siguen demostrando su enojo por la nostalgia que le provoca no poder disfrutar por más tiempo de este pichón de crack al que siguieron por las redes desde que sus gambetas se viralizaron hace ya más de siete años.
Echeverri y su entorno, juran en el Monumental, tenían decidido que el futuro no estaba en River desde que aceptaron firmar el primer contrato. Por eso en Núñez, ahora, tendrán que disfrutar de esos 18 millones que recibirán en tres pagos y a los que deberán descontarles los impuestos; el pago al club de origen del futbolista (un millón de dólares a Luján de Resistencia como tope por el 15% de la ficha que poseían) y la comisión del representante (7%) más que de las diabluras de una joya a la que pulieron mientras pudieron.
El chico, en medio del debate que deja acerca de la valoración de su transferencia, ya tiene los pasajes en mano y una proyección del otro lado del Atlántico. Porque la historia tenía hace tiempo su final escrito.
Olé