Eiman resaltó el trabajo de la organización, “no solo de la fundación sino de todas las otras instituciones que de alguna forma termina articulando para que hoy suceda esto”,celebró el “predio lleno de gente” y señaló que “el domingo hubo una cantidad impensada y, sin embargo, todo fluye con normalidad y se disfruta”.
Conversando con el móvil de CIUDAD TV, frente al área de trabajo de los participantes del certamen, el presidente de la fundación Urunday remarcó que “ese es el corazón de la Bienal, acá arde el fuego sagrado de aquel concurso de escultura del 88′, que finalmente se transformó en esta enorme experiencia de arte público, la más importante de la Argentina y de la región y con el tiempo ha evolucionado y se ha transformado también en el certamen de escultura a cielo abierto más importante del planeta”.
“Los diez escultores que están trabajando en este lugar son la élite de la escultura contemporánea mundial, han sido seleccionados entre 157 postulantes de 55 países y tenemos el privilegio de verlos trabajar en tiempo real, en obras que después van a quedar como el patrimonio de todos nosotros”, sostuvo sobre la importancia de la bienal chaqueña.
Eiman citó al fundador del certamen, Fabriciano Gomez, al señalar que “somos privilegiados de poder tener la oportunidad de involucrarnos en el proceso creativo de una obra que después queda para el patrimonio de todos”. “Hoy, si estuviera acá también diría que ellos son los privilegiados por poder hacer esto en un contexto y un ambiente como el que creamos los chaqueños”, sumó.
“Es una fiesta del arte y la cultura, una industria cultural enorme antes de empezar la Bienal, durante la Bienal un motor económico que nos impacta positivamente a todos”, cerró.