El seleccionado de fútbol Sub-17 de la Argentina perdió ante Mali por 3 a 0 y culminó en el cuarto puesto en el Mundial de la categoría que se desarrolla en Indonesia.
El encuentro se jugó en el estadio Manahan en la ciudad de Surkarta, con el arbitraje del chino Ming Fu, y los goles fueron marcados por Ibrahim Diarra (8m PT), Mamadou Doumbia (45m PT) y Hamidou Makalu (3m ST).
Argentina fue claramente superado por el equipo maliense, en lo físico y técnico, perdiendo la chance igualar las mejores actuaciones en mundiales sub-17 alcanzadas en 1991, 1995 y 2003 cuando culminó en el tercer lugar.
La final será este sábado, desde las 9 de la Argentina y en Surakarta, entre Alemania, que eliminó a Argentina en semifinales en serie de penales tras haber empatado en los 90 minutos 3 a 3, y Francia, que superó a Malí por 2-1.
Argentina padeció algo muy similar a lo que vivió en el debut al perder ante Senegal (2-1), se enfrentó a un otro equipo africano muy físico, con jugadores muy potentes y veloces.
La superioridad africana se planteó en la zona media con la presión ejercida por Sekou Kone y Moussa Massire Diop, la inteligencia para moverse de Hamidou Makalou y el peligro que planteaban en cada incursión ofensiva Mohamoud Barry e Ibrahim Diarra.
Tomando en cuenta el desarrollo no tardó en llegar el primer gol africano con un zurdazo al palo izquierdo de Diarra que superó a Florentín, quien ya había salvado su valla ante un remate al ángulo de Makalou.
Argentina no contó como titular con su máxima figura Claudio Echeverri, a quien le falleció la abuela e ingresó en el segundo tiempo.
Pese a todo logró equilibrar el desarrollo del juego en los último 15 minutos con algunas apariciones de Gustavo Albarracín, Ian Subiabre o el goleador Agustín Ruperto.
Sin embargo, pese a la mejoría, el equipo de Diego Placente no pudo terminar de peor manera ya que en el adicional Doumbia estableció el 2-0 con un cabezazo.
En el inicio del segundo tiempo Malí pegó otro letal golpe a las aspiraciones argentina cuando Makalou estableció el 3-0 con una exquisita definición dejando en el camino a dos defensores argentino y al arquero.
El resto del partido fue de dominio maliense. No se incrementó la diferencia por la muy buena tarea de Florentín, quien fue injustamente maltratado en las redes sociales por su floja actuación ante los alemanes, y en parte porque el rival no se extremó demasiado.
Fue derrota en la despedida, en la actuación más floja de la Argentina, pero este final en nada invalida el muy buen desempeño del equipo en el Mundial.
Télam